miércoles, 5 de febrero de 2014

Bert Hellinger. Padre de las constelaciones familiares.


Psicoterapeuta alemán, nacido el 16 de diciembre de 1925 en Leimen, Baden, Alemania. En la actualidad cuenta con 88 años. Su especialidad, las constelaciones familiares y las terapias sistémicas.

A continuación el estracto de una de sus entrevistas...


La comunicación de alma a alma revela, de una manera estraordinariamente sencilla y dolorosa, cómo estamos inconscientemente ligados a nuestra familia como referente. Debemos liberarnos sin separarnos.

A veces nuestros antepasados se mezclan con nuestro destino.

"Un saber colectivo es accesible a cualquier individuo y puede formarse en cualquier grupo" . Rupert Shedrake.

Los que han sido excluidos (y permanecen como fantasmas) pueden revelarse y ser reconocidos. Cada uno encuentra su lugar.

Durante una sesión, el terapeuta se centra y se mantiene abierto a cualquier cosa que pase. Presente, sin miedo ni crítica, sin intención, sin apego al resultado.

Lo importante es lo que sale a la luz. Lo que actúa no es el terapeuta sino la realidad emergente de la situación que se representa.

Se trata de adoptar la actitud de alguien que medita, pero abierto a lo que ocurra a su alrededor.

No es cuestión de querer ni de curar. Debe ser inconsciente. Se trata de estar allí, observar y, eventualmente, explicarlo.

Si uno espera el tiempo suficiente, las palabras o actos se imponen por si solos.

El terapeuta coloca "sin saber". Es durante, o al final, cuando todo se aclara.


"Nunca se lo que busco hasta que lo encuentro."

La solución aparece cuando todas las personas de la constelación se sienten bien en su posición.

Las sesiones suelen durar media hora.

Darte cuenta de un bloqueo, aunque no lo soluciona, puede desencadenar en el interior de la persona, un nuevo proceso que ayudará a resolverlo.

Marcarse un objetivo de éxito o de curación, implica mucha voluntad.

La constelación reinstaura el orden en el sistema familiar y reinyecta armonía colocando a cada uno en su lugar respecto a los demás.

"Ahora sobre el incesto. Si usted se ha confrontado con una situación de incesto, una muy común dinámica es que la mujer no ha cumplido con su marido, ella rechaza mantener relaciones sexuales. Luego, como compensación, la hija toma su lugar. Este es un movimiento inconsciente, no consciente. Como ve, en el incesto, hay dos perpetradores, uno en la sombra y otro al descubierto. No puede resolver el problema a menos que salga a relucir el perpetrador escondido. Hay extrañas frases que "sacan a la luz". La hija dice a su madre "Lo hice por ti." Y ella puede decir a su padre"Lo hice por mamá." ¿Cuál es efecto de estas palabras? El incesto no puede continuar. Si quiere pararlo, esta es la mejor manera, sin acusaciones. Si se lleva al perpetrador a la justicia, la víctima expiará (se sentirá culpable) por lo que se le ha hecho al perpetrador. "


Cada miembro de la familia tiene una plaza definida que participa en el equilibrio del conjunto. Es como un móvil, si se excluye una pieza todo él se vería afectado. Por lo tanto, todos los elementos está unidos y se influyen mutuamente.


"Te sigo", es una dinámica muy frecuente en las constelaciones. Significa que una persona se siente forzada a seguir los pasos de otro miembro de sus sistema. A menudo es un "te sigo" en tu enfermedad", "te sigo en el sufrimiento" o "te sigo hacia la muerte". En las terapias grupales, se suele reflejar al colocarse, de manera iconsciente, un familiar vivo (el que lo representa) detrás de otro que representa a un familiar muerto.


No se puede "salvar" a nadie si está convencido de tomar las decisiones correctas, inconscientemente sigue las reglas familiares. Es la gran ley familiar de la pertenencia.


El simple hecho de pertenecer a un grupo nos disculpa de todas las acciones que podamos ejercer en su nombre, por su cohesión, por su supervivencia.


La aspiración de pertenecer al grupo (el familiar es el más fuerte) constituye, en las capas más profundas del inconsciente, el principal motor de nuestros actos.


la buena conciencia, es una necesidad infantil de lealtad hacia nuestros padres. El adulto debe liberarse de ella.

La conciencia del clan supera al individuo y vela para que nadie quede excluido. Para que todo vuelva a su orden, será imperativo que la persona excluida recupere su lugar, si es necesario, bajo la forma de un sustituto.

Existe una especie de memoria conservadora que se esfuerza porque la figura original permanezca y todo el mundo siga en su sitio.

No se hacen constelaciones por curiosidad. Lo que está en juego son asuntos graves. Cuando uno se encuentra impotente frente al sufrimiento.

La terapia es útil para tratar el cancer, anorexia, problemas de adopción, violación y problemas de pareja.

En los problema de pareja, constelar, es útil para evitar una separación o provocarla. El que quiere marcharse, quizás inconscientemente sigue el destino de un miembro de la familia que, en otra época, se vio obligado a abandonar a la persona querida. Y quizás, el que se queda, lo hace por lealtad a un antepasado que cobardemente abandonó a su familia.


El constelador no es médico, su objetivo no es "curar".


Cuando se interrumpe una constelación antes de terminar, horas o dias después, la persona me contacta y me dice que se están produciendo cambios profundos en ella.


La cuestión es saber si el alma seguirá al inconsciente y si uno está dispuesto a dejar atrás los beneficios secundarios de la repetición y el sufrimiento. A veces, esto es muy doloroso.


Todo el linaje, a través del padre, reconoce al hijo.


Es algo "litúrgico" y por eso es importante practicarlo con gran conocimiento y profundo respeto.

2 comentarios:

  1. Constelar un problema es mejor que tener que aliviarnos con psicofármacos.

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    1. Totalmente de acuerdo. Lo primero es una forma de afrontar el problema. Lo segundo es huir, temporalmente, de él. Gracias por comentar.

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